11.11.2010

derechos y deberes

Hoy asistí a los juicios públicos contra los imputados por los crímenes de la dictadura¹. Me tocó escuchar a un testigo, quien había sido director de la escuela de cine y que en mayo del '76 fue llevado preso junto a otros directores y decanos de la UNC (entre ellos arquitectura) por tener "revistas prohibidas". Permaneció privado de su libertad durante 5 años, sufrió varios traslados y fue torturado.

Lo cierto es que viví varios momentos muy impactantes y fuertes. Las emociones son imposibles de explicar, pero necesarias de vivir. El presenciar estos juicios es un derecho (y a mi juicio un deber) de todos los argentinos². Lo cierto es que, para mí, "los militares" en mi vida no es más que una fea historia, pero no algo que me llegó de cerca. Justamente veo a estos juicios como una oportunidad a aprender de nuestra historia, que todavía está latente, para poder mirarnos hoy y notar lo afortunados que somos en poder ejercer un derecho tan básico como la libertad (per se, de expresión, etc.). 

Una generación entera fue atacada y destruida cruelmente mientras luchaba por esto que todos hoy ejercemos. Es en ese punto que nuestros derechos se transforman en deberes y el estar presentes, siendo testigos, casi una obligación.




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notas
¹: la asistencia es pública, gratuita. Martes y jueves de 9.30am a 6.00pm (aprox) en Tribunales Federales de Córdoba (atrás del Parque Sarmiento) con DNI.
²: había una chica extranjera, tal vez del norte de Europa, que también ejerció su derecho a entrar.

2 comentarios:

Fernando Santos dijo...

Lo más gracioso es que gente que SÍ estuvo "tocada de cerca" por la dictadura (porque vivió durante esa época) tiene la indigna ignorancia de quererlos de vuelta y justificarlos con una "guerra sucia" entre ciudadanos y estado.

Te quiero mucho, hermanito :)

Martín Lemma dijo...

Lo importante no es conseguir lo que queremos, sino que nos guste después dde conseguirlo... Eso leí en algun lado y me veo en oportunidad de compartirlo aquí. Las palabras se pronuncian y puede que se pierdan con el viento o con los rayos fuertes del sol, lo importante es que dejen huellas y hagan eco en el corazón... Mucho gusto y pidiendo perdón por errores ortográficos que aquí en la nueva tecnología no se manejar, te saludo con afecto... Cami